Solipsistas

Crea el orbe; y a Dios: el solipsista
y funda por decreto el universo,
se proclama campeón de todo el verso
y dirige su orquesta: de un solista.

Disfraza a su salvaje de aticista
de dulce, mas severo, a su perverso;
y en su mundo unitario; a lo diverso
aherroja en la prisión del formalista.


Proclama que su idioma es "el lenguaje"
en su pila sin sal le da otros nombres
y se hace a si mismo el homenaje
que le dan los demás a los prohombres.

Quien lo observa lo mira; y asombrado
se da cuenta que aquel está tocado.​

 

Ja, ja, muy bueno.