Simplemente yo 3era Parte

"Simplemente yo III"​

Era ya el año 2000 el comienzo de un nuevo siglo y la puerta para conocer
nuevos retos.
Había abandonado la Universidad y me puse a buscar empleo.
Pronto encontré en una empresa y todo empezó a ser una oportunidad
de realizarme en algo nuevo.
Los primeros días fueron difíciles pero al poco tiempo me adapte al trabajo.
Me sentía diferente a los que laboraban ahí por mi manera de desenvolverme,
era demasiado callado e independiente, sólo trabajaba y al salir me iba sin
despedirme de nadie.
A los pocos meses me enamore de una mujer maravillosa que trabajaba ahí.
Todos los días esperaba verla pasar cuando iba a tomar el camión y sólo la
miraba.
Sabía que tendría que hablarle tarde o temprano pero nunca pude y mejor me
hablo ella.
Comencé de pronto a cambiar mi imagen, me deje crecer de nuevo el pelo, a
vestirme más moderno, me puse frenos y me volví algo vanidoso.
Con el tiempo me di cuenta que ella sentía lo mismo por mí, pero parece que la
suerte no siempre me sonríe y caí en los brazos de otra mujer que acababa de
conocer.
No se que me sucedió un paseo, un rato y todo lo que había tratado de lograr
para conquistar a la mujer de quien estaba tan enamorado se acabo, la otra
mujer fue más atrevida y me atrapo con sus caricias y su manera de besar.
Total como trabajábamos donde mismo se dio cuenta la mujer de quien estaba
tan enamorado que salía con alguien de la misma empresa y creo que le rompí el
corazón, es difícil describir su rostro aquel día que la vi de frente tenía sus ojos
tristes como si sé aguantara las ganas de llorar y se notaba decepcionada o
deprimida, yo me sentía peor.
Pero pues ya no pude ocultar lo que era muy evidente.
Al mes se termino mi fugaz noviazgo, por lo mismo que no me sentía a gusto, lo
único que me dejo de recuerdo aquella novia fue el vicio de volver a fumar.
Después me entere que ella era casada o se iba casar y me dio una especie
de odio hacia mi vida.
Había perdido todo por nada sólo por no obedecer a mi desconfiado corazón.
De nuevo empecé a tomar y a fumar, me portaba muy mal en el trabajo cada
semana me suspendían por estar haciendo algo indebido.
Sin darme cuenta ya había hecho amistad con toda el área que estaba a un lado
de donde yo estaba.
Me empezaron a invitar a fiestas, paseos, reuniones y conocí nuevas amigas.
Todo era un buen pretexto para conocer la locura en otro aspecto.
Me sentí de alguna manera popular y me quedaba platicando en donde sea, sólo
perdiendo el tiempo con personas que a veces ni conocía.
Cada fin de semana era de salir a algun antro siempre con una compañera distinta.
Pero algo inesperado paso en aquellos días.
De pronto me deprimí, me aburrió mi vida, quería dejar de ser lo que era, quería
estar sólo con mis ideas, quería estar tranquilo, perdí mi vanidad y las ganas de
salir, creo que olvide como disfrutar la felicidad que aparanteba tener.
Después de estar un año y medio en esa empresa trabajando me despidieron por
un reajuste de personal y nunca volví a ver a nadie de ahí.