Si no puedes proteger…

Si no puedes proteger, al menos sé lo suficientemente fuerte como para no necesitar ser protegido.​

Cuando damos demasiado peso a lo que viene del exterior, transformamos nuestra realidad, porque dejamos de actuar desde nosotros mismos y empezamos a vivir según lo que otros consideran correcto. Aprender a reconocer cuándo es el exterior y no nosotros quienes influyen en nuestras decisiones es clave. Dar paso a lo externo no es fácil y puede hacernos sentir débiles o derrotados, pero al avanzar y mejorar, descubrimos que no somos capaces de todo, aunque sí podemos aceptar ayuda con humildad sin que eso afecte nuestra esencia.



Crédito de la frase: A quien corresponde.


Te invito a disfrutarlo en el formato de video, solo espero que sea de tu agrado, gracias.





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