Seda, Mar y Sol

Piel de seda, ojos de rubí, mirada de ángel
rostro de clavel, así te veo, siempre; cómo
cuando el sol sale y calienta las primeras hojas
del cerezo o cómo cuando la flor desprende
su perfume al viento, así te siento, siempre.

Como sal en la mar, como el rocío de la mañana
en las flores, como luz de luna llena estas en mis
noches, así te has metido en mi cómo una
espada en la roca.

Cuando al pasar me miras, mi alma tiembla
y siento que el tiempo se detiene en tu mirada,
me dejas sin palabras, sin respirar, siento que
no puedo más.

Tu eres el sol y yo la hierba que se alimenta de ti,
yo soy la roca y tu la mar que me hace arena, eres el
viento que mueve mi barca y la brisa que refresca
mi ser.​

 

Vaya, buenas imagenes en tu escrito, y ¡Cuanto amor! definitivamente un poema muy bello, me gustó. Un placer haberme paseado por tus letras

Saludos:S

 

Excelsa la primera estrofa. Te felicito por tu obra. Saludos.

 

Muy bueno tu poema, pero coincido con Salvador, la primera estrofa es excelente.

saludos poeta

EMU