Nuestras cómodas celdas

Jaulas de hormigón
con ventanas de cristal
cómodas celdas con sillones
cómodas estancias donde no pensar
frente a televisores de plasma
se evade uno mismo
mejor de la realidad,
resulta mas cómodo, más practico
sus mensajes se nos hacen más dulces
y nuestra ignorancia nos hace más ilustres.

Nuestras cómodas cadenas
son las imágenes que nos proyectan
encadenan nuestras ideas
y es que ya somos incapaces
de prescindir de nuestras celdas,
porque el carcelero
se encuentra dentro del laberinto
de nuestra cabeza
y se llama falta de conciencia.

 

Gran poema y gran final. Te envío reputación.
Saludos,
Guderio.

 

La conciencia, humilde palabra, que llena pensares...en forma de ausencia en los poderosos. Un placer.

 

Gracias Guderio por la reputación, me alegro que te gustara el final pues siempre pongo gran detalle en ellos.

Saludos y gracias por opinar