Nadie puede impedírtelo

El sol se despide,
la noche empieza, increíble.
Yo contemplo la esperanza libre
y mis sueños que viajan hacia lo imposible.

El camino es breve,
de día soleado y de noche llueve.
Algo dentro te mueve,
es como la música, sólo deja que te eleve.

Corre, camina o vuela,
olvida lo que te han enseñado en la escuela.
El sol es tu maestro, al igual que el tiempo,
olvídate de la física, deja tu cuerpo.

Nada de eso necesitas,
sólo una esperanza y un sueño.
Lucha por ellos a puño y lanza;
golpea, respira y grita.
Ponle huevos y empeño,
que nadie te arrevate lo tuyo.

Y nunca digas: “no puedo más”.
Porque yo sólo sé que sí se puede.
No te rindas jamás,
salta hacia el vacío atrévete.

Has lo inimaginable,
has que el mundo vibre,
nadie puede impedírtelo.

 

Bello, hermoso, grande, grandes palabras conmovedoras, un perfecto trabajo admirable.

 

Sobre todo mi querido Lope, es necesario, casi imprescindible olvidar todo lo que nos han enseñado en la escuela si queremos ser libres, ya que allí lo que nos enseñan es a ser esclavos de un sistema cada vez más caduco. Gracias por este regalo. Un abrazo y estrellas para ti querido poeta.

 

Muchas gracias Jorge, siempre leyendo y dejando tu huella. Un placer tenerte por haca, gracias! un abrazo.

 

Muchas gracias Dulcinista, la verdad es que la escuela es el camino hacia la esclavitud, a todos nos guían ha el sistema. Y lo peor de todo es que nomas no cambiamos... un abrazo!