MuÑequita de aparador

Como con el rose de tus dedos
siente el palpitar en mí ser
recordando la miel de tus besos
por ti tiendo a desobedecer.

Pasear por el jardín
de la plaza en el centro
parecen no tener fin
todo lo que brota de adentro.

Al pasar los días pude descubrir
lo que nunca pensé de ti
no quieres dar ni recibir
yo no quiero estar así.

Eres mi muñeca en el aparador
sentirte mía sin serlo en realidad
ciertas noches puedo ser tu protector
en otras te fugas por la ciudad.

Como cuando busco a alguien
por que mis pesares me arrebatan
lo que yo no se y muchos saben
estas en el cine y no te delatan.

Ya no quiero una muñeca de aparador
quiero decir “mía” ante todos
no tener que ser a veces perdedor
muy a tus maneras y a tus modos.

Me merezco alguien con libertad
que no le de pena salir junto a mi
le daría toda mi completa ansiedad
pero ser mi novia al fin.

 

Buen poema, pero creo que debes darle algunos arreglos para mayor presentación tal vez, eso desde mi punto de vista claro.

Saludos y estrellas.