Mio...¡ nada!

Arrogancia humana
¡dueños de lo que nos rodea...Creernos!

Mi casa...¡ Nada!
una tempestad, te la puede quitar.

Mi trabajo... ¡Nada!
mañana, sin el puedes estar.

Mis padres... ¡Nada!
la vida, te los arrebatará.

Mis hijos...¡Nada!
un día crecen, dejando vacío tu regazo.

Mi amor... ¡Nada!
descuidos , con el pueden acabar.

Mi vida... ¡Nada!
En un minuto, todo , llega un final.

¡Nada tenemos!
solo el tiempo, solo el hoy
Dios nos lo presta...
Para disfrutar de lo que nos rodea.

Nada tenemos...

 

La vida es una sola, no tiene repuesto y es prestada, por eso será? Me
impresionó el final: disfrútalo cada instante como única oportunidad.

 

Gracias mi estimado poeta, por tu presencia en mis versos, saludos

 

Nada nos pertenece, sólo el presente... y es raudo en escabullirse.
Comparto esa filosofía y me encantó tu poema, que ve como todo ha de pasar a pesar de nuestra presencia... al fin y al cabo somos poca cosa.
Un saludo y encantado de encontrarme con tus letras.

 

Muchas gracias poeta por leerme y por tu gran comentar, un gusto,saludos

 

Valiente lucidez en su poema.

Saludos.

 

Muchas gracias por leerme, un abrazo