Los duendes de la memoria

Dicen que hay duendes que se conversan al oído,
los hilos de cristal que nos unen unos con otros.
Dicen también que las hadas se pasean descalzas por las terrazas del alma
para incomodar así a los azotes del tiempo.
Los amigos siempre invisibles de nuestra infancia,
mas los héroes y heroínas aun están ahí,
en un galpón de nuestra mente,
aguardando nos demos cuenta cuanto nos hacen falta.

Tan extraña la apariencia de los adultos
que solo nos aferramos a la fantasía para hablar de la niñez,
de un tiempo pasado,
de unas conquistas que ya nunca volverán.
Porque los impulsos, por no ser metódicos,
no tienen lugar en las esferas de la madurez.
El anonimato de la infancia,
es nuestro recurso cotidiano para socavar
lo impenetrable de la burguesa mente nuestra.
Los imposibles se baten a duelo
y nosotros solo pensamos en empezar,
[SIZE=3]solo para acabar una vez mas.[/SIZE]

[FONT=Tahoma][SIZE=3]Los invito a refugiarnos en ese niño de antaño.[/SIZE]

[FONT=Tahoma][SIZE=3]Renovemos asi nuestro compromiso con lo humano [/SIZE]
[FONT=Tahoma][SIZE=3]y seamos felices con lo cotidiano que es lo realmente esencial.[/SIZE][/FONT][/FONT][/FONT]