Lentamente mirando atrás

El suscriptor que has llamado
no puede contestar esta llamada,
por favor, no dejes un mensaje,
aleja tus alas del inmenso calor de los adioses,
márchate entre las enredaderas de mi olvido
y no vuelvas a intentarlo más tarde...

 

Qué fácil es amar y qué difícil olvidar (Neuda), plantamos enredaderas de olvido y al final quedamos enredados nosotros mismos. Tus versos,Espino, son deliciosas enredaderas de poesía que llenan de belleza este nuevo día.
Encantada de leerte. Besazos, estrellas y reputación merecida.

 

mil gracias, lomafresquita, gracias por tu paso entre mis pequeÑas letras. Un abrazo gigante.

 

Espino-za:
Que profundidad en tus seis líneas amigo, se me hizo un nudo en la garganta. Desearíamos que lo que termina se marchara en esas enredaderas del olvido y sin embargo, entre el empeño de olvidar más se tiene presente lo perdido. Ojalá bastara un simple aléjate para olvidar. Ha sido grato leerte. Te dejo estrellas, abrazo cálido y sonrisa iluminada. Gracias por compartir.

 

Infinitas gracias, Grace, por tu valoración a mis letras. Encantadísimo de que hayas pasado y te hayas detenido a dejarme tu hermosa huella. Abrazos.

 

Los olvidos no son más que simples excusas de memoria.
No se olvida, solo se deja de recordar...
quizás por eso es que escribes enredaderas de mi olvido,
porque siempre quedan rastros...

Estrellitas armoniosas

 

Es cierto, la memoria del amor es una caja sorprendentemente selectiva y caprichosa. Abrazos.