Las Calles De La Ausencia

Mis calles, ¡ay!,
no son las de antes; tienen hambre,
navegan abandonadas de besos
y se consuelan mirando
un océano de ventanas vacías.

Tus calles están alerta,
pincelan la luz
con sus largas trenzas de sombras;
ya atardecen en las terrazas
donde tiritan las antenas frías.

Nuestras calles de entonces lo invaden todo,
afónicas rugen con su olor de alquitrán
y tienden sus manos para escribir en el viento
que todo es un sueño de melancolía.

Calles que palpitan,
dejando pintadas en paredes diáfanas
el aleteo de los pájaros que trinan en árboles de acero
mientras la vida, busca el monótono tic- tac de los días.

Mis calles, tus calles, nuestras calles,
inundadas de luz y de viveza
nos amaban desde los tiempos
ya lejanos que amargan los adjetivos
y buscan nuestras voces en la lejanía.

 

Mr. Pepe..otra hermosa entrega poética...el transcurrir del tiempo y los cambios de esas calles...cierto dejo de nostalgía...saludos fraternos...Mariela

 

Muchas gracias Mariela, es un placer para mí que te guste mi poesía.
Un beso
Pepe Cercas

 

Hermoso .Cada verso habitado de nostalgia. Me hagustado leerte en esta fria mañana de noviembre, donde la bruma no abandona las calles.

 

Me situé en ese centro donde el asfalto puede llevar separadores, una línea amarilla -continua o discontinua- allí donde el corazón estaciona sin celdas de reposo...

Pepe, usted le escribe a la nostalgia y la pega en mis poros...qué arte para transmitir.

Un gran abrazo desde esta parte del mundo.!

 

Esas calles olvidadas y de la ausencia. Que seguido recorremos esas calles!!!!!!!!
Es genial tu obra. Un fuerte abrazo.

 

Oh, Pepe... si las calles hablaran. Recitarían, en fin, estos versos de amor y de nostalgias como brisa y letanía poéticas.

Estrellas callejeras y un gran abrazo desde Buenos Aires.