La visita del amor.

La visita del amor.​

Las noches iluminadas como ésta
siempre arrastran un poema.
Aunque inunde de tristeza
el torrente de mis venas,
el recuerdo de su voz
hace más grande esta pena.
La dama que muchas veces me buscó,
tiene hoy los ojos de un adiós.
¿Será que acabaron los versos
que su belleza me inspiró?.
En el sonido del viento,
mezclado con el calor,
son muchas penas dolidas
en esta mi alma triste...
en este agonizante poema lleno de amor.
Pinceladas dedicadas a la entusiasta dama
que se quedó con mi amor.
Aquella que se fue por el triste campo;
aquella que un día utilizara su cuerpo
para dar sombra al empedrado de mi yo;
aquella que dejó a mi alma vagando errante,
y palideciendo sin su candor.
Ya casi la he olvidado,
pero aun lloro por su amor,
beberé triste mis lágrimas
en la cantina del pueblo,
donde un día en cuerpo y alma
ella me visitó.​

Edwinpaul.​

 

buen poema