La mitad de la vida

Me dijo la lluvia,
me dijo el sol,
me dijo la luna,
me dijo el mar,
me dijo el bosque,
me dijo el zarzal.

Me dijeron la nubes,
me dijeron las estrellas,
me dijeron los montes,
me dijeron los valles.

“Hemos caminado juntos,
siempre a tu lado,
siempre a la vista,
y tú siempre absorto,
siempre atareado.

Nunca nos llamaste
cuando buscabas
sosiego para el alma,
fortaleza en el desaliento,
inspiración para tus proyectos,
constancia en el deber,
la luz para tu camino,
el sentido de la vida,
la razón de tu existencia.

Nunca observabas
el cambio de las estaciones,
el prodigio de un amanecer,
los matices del atardecer,
la variedad de las flores,
el lenguaje de los animales,
el gorjeo de los pájaros,
la música del arroyo,
la poesía de un paisaje.

Así tú te fuiste sin despedirte
sin oír nuestras voces.

Nosotros, fieles amigos y compañeros
seguiremos facilitando
el camino a los humanos viajeros

y tú si puedes vuelve enseguida,
pues solo has vivido
la mitad de la vida".

 

Tu poema me ha gustado mucho! plasma lo esencial, desde la gratuidad universal de poder gozar con los sentidos los regalos naturales que llenan el alma de quienes los descubren. Saludos!

 

Muy apreciada su generosa opinión sobre mi sencilla expresión de amor universal. Gracias.