Insterticio IV

Cercana a la mirada que te recuerda a tu madre,
sobre la frente esperas un beso, y el alivio,
una pequeña luz que impresa puede ser una cárcel, una escuela, un hogar;
Absorto, espero que absorta enrojescas estos papeles que tanto te extrañan.

El adolescente arde hasta el anochecer, y es claro e injusto,
puede encender a todos los seres extraños con un rumor de romance
y apagarlo con calma, sin viento, solitario.
Entonces, yo ya soy viejo, aunque tropezar es mi esencia,
entonces, tengo tanta memoria que duermo, que como, que vivo muriendo a diario.

Tras la inmóvil desesperación que resulta la distancia,
toda carne nos dice donde estamos, que somos, que no somos.
Sin embargo un pretérito artificio reaparece cada vez que el espejo se rompe,
es un gesto de antiguo hijo que tiene miedo a crecer,
es un gesto de esperar que el espejo solo se ha roto en su interior.

 

¡¡Bellos versos abcd!!, se debaten entre la incertidumbre y la ausencia, no se diluye su figura a pesar de la tristeza y de todos los espejos rotos.
Saludos Poeta