Hasta la viruta

A Maroc, que no dudó en recordar.


Turquesa y agobiante.
Escandalosa y alegre.
La noche de Haití me embiste,
espléndida y triste.

Y luego la luna
me enseña sus dientes,
su garfio impaciente,
su cuna precaria.

Mañana en la isla
será innecesaria
la pobre moneda
el toque de queda
por miedo a la peste.

Será innecesaria
después la violencia
del himno aunque cueste
tu vieja inocencia,
los siglos de sombra,
la fruta salvaje.

Habrá que quitarlas
también del paisaje
aquellas banderas
de prepo y quemarlas
hasta la viruta.

Que no te resulte extraña
ni desmedida la asonada
entre cañas de azúcar refinada.

 

Hermoso poema casi todo en hexasílabos, dedicado a la gente de Haití que sufre miseria y pobreza. Un gusto leerlo.

 

Abrazo compañera, ya vendrán versos mejores.

 

Tus versos son excelentes, solo hice un apunte al ritmo. Un abrazo.

 

Llegará algún día, la aurora radiante y límpida a brillar nuevamente sobre la superficie sufrida de esa alicaída nación.
No sé que oscuros intereses, se ciernen sobre la equidistante armonía de sus playas... por qué el ataque aleve a su soberanía y al corazón de sus raíces.
Algo hay en Haití que perturba el avance pervertido del tesoro de la ignominia.
Me gustó la forma como encaras con tus versos descarnados, el axioma indolente con que se han encarnizado sobre esa humilde nación.
Gracias, mi estimado Riolita, por compartir tan interesante obra
Saludos y un abrazo

 

Gracias a vos, Antonio.
Comparto tus mismas interrogantes
y deseos de redención para con ese sufrido pueblo.
Su trágica historia y no menos duro presente me dan vergüenza.
Te mando un abrazo.

 

Muy bueno Riolita.

Saludos.

 

Gracias estimado Maroc.
Me inspiré en tus "olvidados del mundo".
Gran saludo.