Flor blanca

Flor blanca de luces apagadas
en tinieblas te encuentras,
a oscuras y sin vida te quedas
y encogida te arrastras.
Por más que te pese y cedas
con angustia encontraras
el quejido profundo de tu bondad.
Flor blanca de luces apagadas
todo lo tenías y ahora de silencio te impregnas.
Ahora tus penas son grandes.
Todo te quema,
todo te daña, nada te consuela.
¡Qué lástima! ¿Cómo podría ayudarte sin dañarte?
Dime el porqué de tu fracaso,
dime el porqué de tu fatal destino,
¿a qué se debe esto?
¿por qué llega tu final?
Tú que desprendías aromas sutiles
que me embriagaban y llenaban de amor,
me llevaban a parajes nunca conocidos
y allí mi alma se ensanchaba,
desapareciendo todo dolor,
toda angustia, toda aflicción.
Qué más puedo decirte que tú no hayas escuchado
y que no te hayan pronunciado
labios cariñosos llenos de suaves palabras
que expresaban sentimientos provistos de dulces sueños
y de pensamientos nunca soñados,
en paraísos lejanos.

JUAN MANUEL PEÑA RAMÍREZ (PARLA-MADRID)

 

Letras profundas, un gusto, deguste de tu inspiración...

 

Una maravilla de poesía, bellísima obra, extraordinaria.

 

siento una forma de mostrar pureza en sus letras, pero letras sensibles y bondadosas, saludos