Ella es

Ella es fuerte por fuera,
y dulce por dentro.
Con ese aire de señora,
por fuera,
y de tierna niña por dentro.
Dulce como el néctar
que yo como colibrí libo,
embriagándome de su aroma,
emborrachándome el destino,
pasando mi lengua
por lugares prohibidos.
Tiene por boca un verso
sincero, tierno, simple y bello,
dos brazos que abrigan
y un corazón eterno.
Ante sus pies tropecé un día,
y la escalé a besos,
hasta llegar lengua con lengua
matando los anhelos,
hasta llegar alma con alma
fundiéndonos en lo eterno.
Aún hoy visita mi vida,
la razón aún la investigo,
tan valiente debe ser
que no le asusta mi sino,
tan valiente es de hecho
que aún sigue conmigo.

 

Gracias por tus palabras, que el poema interpretan.

Un saludo, Luzyabsenta.