El mar de tu espalda

De negro y con zapatos rojos

como no verte pasar pájaro lunar

si se abrieron los arboles

en tu breve deambular

por el mundo de las hojas,

candor en sus follajes

rigidez en sus troncos

abanicos para ti

todas sus ramas.


La mañana no podía ser más cálida

ni más clara

y tu como una luna inventada

de brillantes solar

hiciste naufragar mis ojos en el mar

de tu espalda al pasar,

murmullo de voces

presurosos mortales en busca de todo

la ciudad se enciende

ya nadie se sorprende,

todo es como es

nadie se opone

ni nadie advierte mi naufragio,

el recuerdo se ha sellado

en el reino que describieron tus tacos

y a quedado colgado de las hojas

de los árboles.


No estaré aquí mañana

y tal vez este en algún rato

de un nunca mas casi improbable,

nada de lo que vine a buscar

encontrare

ni el parque recordare,

pero al volver a la capital

mis ojos buscaran nostálgicos

el lugar donde se ahogaron

sin oportunidad,

y en el mar de tu espalda

te recordarán.​

 

Versos soberbios y admirables de creación espléndida.