Edén

Edén


Tengo prisa. Prisa por vivir.
No temo el mañana incierto,
tan sólo abomino el pretexto
del propio pavor a sufrir.
Quiero saber un poco más
cada día; culminar cada nueva
conquista con una sonrisa
en los labios.


Y, desde el fondo de mi alma,
espero que sea siempre así
porque nunca fui una creyente
del tan renombrado consuelo
del llanto.


No necesito ser ningún sabio
para entender que, tal vez,
el secreto más grande
que la dicha custodie sea,
sencillamente, aprender a ver
la belleza exquisita del prado
a pesar de todas las flores
que se ennegrecieron
y deshojaron.​

 

Un placer visitarte. felicidades.

Saludos,

 

Detras de esas hojas y flores secas y enegrecidas
hay muchas hojoas verdes y flores multicolor
que son muy hermosas y solo hay que hacer
a un lado lo malo para ver lo bueno. Gracias
por compartir tu hermoso y profundo poema
que me ha encantado. Saludos y Bendiciones.

 

Gracias a ambos por vuestras cálidas palabras. Os mando un abrazo muy fuerte.