Caballo blanco

Caballo blanco

Caballo blanco de anchos caminos
Amigo de los días celestes
El galopante, acompañante de mis sombras
Una y otra vez era el
Galopando sin miedo en los suelos rígidos
Con sus ojos llenos de pureza animal
De largas raíces y antorchas en su largo pecho

Montañas de repentinas colinas
El azul del cielo rellenando los suelos de estas tierras
Yo y mi caballo blanco
Ya no me siento solitario
La paz junta a mi alma y los recuerdos tristes, muertos ahora están

Aun recuerdo esa canción
De la mariposa errante
Al ver mi caballo desnudo en la sangre
Herido de manera mortal y mis ojos sin para de llorar
Era como Haver muerto
Mis ojos se desasían como arena en el viento
Cuando el daba su ultimo aliento
Miro aun esos caminos
Y sin pensar lo recuerdo
Mi caballo blanco
El galopante infinito

 

Tu caballo blanco, tu compañero de andanzas, tu amigo, se ha ido. tristes tus recuerdos plasmados en estos tiernos versos.
Ha sido muy agradable leer tu poesía.
Un abrazo desde Ecuador.
Ana.:::hug:::