Bella.

Compartir tus labios, bella
placer en que falso es el final,
eterno tormento al cual desfallezco,
dulce, como la vida con vos
y tan amargo
como el futuro
que se dibuja Negro,
necio fue el destino
al reclamar tan pronto
el fin de la soledad de El Antiguo
clamando por tu abrazo
que ahora es Mio
como tu perfume
el olor del viento,
una floresta de flores irreales
que huelen tan bien
que dañan los sentidos,
tanto disfruto estar contigo
que se hace impensable
la soledad ante un mundo infinito
plagado de espinas
banales sentimientos
rostros lánguidos
almas en pena que buscan orgasmos en segundos
placeres vacíos
vidas planas
como el camino
que eligen los hombres
cuando no esta presente el abrazo
el beso, el cariño.

Bella, tu abrazo es calido
como el vientre de mi madre
que me lanzo a un mundo,
donde existirías
serias mía
reina de mis días,
si por ti la vida daría
sin pensarlo
cambiaria mi destino
por un segundo más de tú presencia…

Bella, tu mano tiembla,
mientras me aferro con alma y vida a ella,
deseando que el firmamento se abra, y me deje verlo,
para plantearle mis mil y un reclamos…
porque…porque, mi bella
la vida nos ha jugado tan mala broma
de conocernos y amarnos hasta el dolor físico
para luego dejar que se corte
como cordón umbilical vívido
nuestro pasar.

Perdona mi labia de poeta embriagado,
debe ser por el licor de tus labios,
si, estas hermosa, hueles a las rosas
que cosecha La Madre en su jardín milenario,
no importa
que tu cabello caiga,
que estés débil y blanca como un fantasma,
y que te sepa cada día más distante…triste…
no importa,
disfrutemos lo que nos queda,
que nadie tiene comprada la vida,
feliz soy, a tu lado el segundo es un año
abrázame bella, serás mía…
hasta el fin de tus días.