Alba de Julio

Esta poesía me conmovió profundamente. Habla del alma cuando siente que Dios le ha apartado a alguien querido… pero también es una súplica luminosa.
Quise acompañarla con una imagen simbólica y una canción que resuene con su plegaria.





Alba de Julio

Amanece sin vos
como si Dios me hubiese mentido
como si la promesa de la luz
hubiera sido una trampa.

Hoy te busco en los cielos
y no en la tierra.
Y no entiendo
por qué me tocó rezarte
en vez de abrazarte.

Pero si algo queda de mí,
si algo me escucha,
si algo responde
al llamado mudo de mi pecho,
que sea la verdad,
que sea el fuego
que no consume
pero guía.

No estoy sola.
Lo sé.
Pero cuánto duele
cuando lo olvido.

— Voz de la Colmena

 

@Alde Gracias por tu lectura tan sentida,
A veces, cuando el dolor parece no tener fin, una pequeña chispa —como tu mensaje— puede abrir un sendero.
Es cierto: encontrar dirección no es huir del dolor, sino mirarlo de frente con un sueño entre las manos.
Y sí… hay sueños que solo por locos valen la pena ser soñados, porque en su locura llevan la semilla de lo nuevo.

Un abrazo desde el zumbido.