Al nieto que no me llega

Al nieto que no me llega


Presagiaba que un torito
vendría pronto a mi puerta
Y el sueño se haría de luz
cuando el torito viniera,
¡cubierto de sal y nácar
hermoso de luna llena!
¡Tú no me llores, chaval
que vendrás cuando Dios quiera!
Yo estoy llorando también
porque sé que no estás cerca…
y que no podrás jugar
en el portal de tu abuela.
Veo nubarrones negros,
ciegos de furia y tormenta,
tormenta de lluvia y vida
la ... vida que se me seca.
Los años parecen breves
y pocos los que me restan,
dulce sueño, sueño cálido
de amores llenos de estrellas
Y en los clarines del alma
voces calladas me inquietan
voces de un nieto perdido
por culpa de una moneda:
la moneda, cara y cruz
que, con el ego, se enfrenta.
¡Tú no me llores chaval
que vendrás cuando Dios quiera!
Cuando tu padre y tu madre
compren tu capa de seda,
tu cuna hecha de ensueños
y de palabras sinceras;
y los gestos egoístas
no olviden la descendencia,
ni los amores nublados
se olviden de las promesas…
Tendré clavado en el alma
hasta mi muerte tu ausencia
porque sé que no vendrás
a completar mi cosecha
-fresca ilusión de mi vida-
ni a darle un beso a tu abuela.

 

Compañero a ritmo de pasodoble nos dejas un melancólico poema, yo también me hago a esa idea, pero lo acepto de un modo más positivo.
Lee (si quieres), "Llegarás, mi niña", en poemas infantiles. Para que veas esa positividad, no te pido opinión pero te aconsejo que lo leas. Tu poema es muy bonito.
Bendiciones. Pili

 

Un poema con cadencia y musicalidad melancólica. Me identifico mucho con el contenido porque mi nieto aún no llega. Dios es grande y oirá nuestros ruegos. Saludos.

 

Querido amigo, a esperar con paciencia, habrá circunstancias por los que aún no llega. En cambio algunos como yo, ya hemos sido bendecidos y en décimas te dejo una:

A LUSSIANITA
Por su cumpleaños.

Hoy, mi linda nietecita
Llena de encantos y sueños
Veo tus gestos risueños
Oh! Mi linda princesita
Y quien hoy te felicita
Y ruega con fe al cielo
Que tengas un alto vuelo
Cual un águila dorada
Oh! Mi Lussiana encantada
Te canta con amor tu abuelo
II
Llevaste tus alegrías
Hacia lejanos destinos
Y siempre nuestros caminos
Marcaron sus cercanías
Como cercanos los días
Que solíamos jugar
Abuela enseñándote a cantar
Canciones al pie de tu cuna
A rro rro mi bella luna
Duérmete que debes descansar
III
Hoy que cumples tres añitos
De ternura e inocencia
De madurez e inteligencia
Cuando me cuentas cuentitos
Veo en tus vivos ojitos
Un cielo azul y estrellado
Y en silencio muy callado
Solo atino a escucharte
Para después abrazarte
Ufano, feliz, extasiado
IV
Solo espero que algún día
(y es un anhelo ferviente)
Busques en mí tu simiente
Con fervorosa porfía
Será mi más grande alegría
Ya que siempre te he querido
Por lo cual he prometido
Quererte aún después de la muerte
Angel de amor bendecido.
CON AMOR: TU ABUELO.​