Al Dios Vencido

Manan sangre las heridas

Comenzaste muy temprano
siempre tan bien orientado
con tu Hijo de la mano
mas se la hubiste soltado...
"¿Qué hicisteis?"
"Os habéis equivocado"
Siempre los otros,
los que no están a tu lado...
En tanto crecían lujos,
fortuna y comodidades
entre ciertos siervos más leales
Te intuí desandar lo andado
en busca del desatino
serio como árbol marchito,
triste cual lágrimas secas
en las huellas del destino...
Quise llamarte y no oíste
mi voz pronunciar tu nombre,
ibas lento y apagado
como fantasma de un hombre
Corrí a abrazarte, no pude:
te habías vuelto intangible
y ciego para enmendar
lo que ya era incorregible
La alborada no te toca
no hay consuelo que te llegue
Tu omnipresencia es derrota,
la quieta verdad se mueve...
De gracias y promesas varias
el altar antes colmado
hoy solo muestra una imagen
vacua de lo que fue loado.
Aún quedan hoy a tu amparo
ejemplares de museo
(nada de héroes ni santos)
con deseos de pasado
y hacia lo nuevo el espanto
por lo que asoma y vendrá
Te invocan, piden, suplican
lo que jamás les darás
Están donde no desean
por el desorden del mundo
con ojos llenos de espanto
y odio en el corazón
dan clases sobre el amor
con cruces que los protegen
sin suficiencia ni fe
de lo que arriba y será...
¡Ay tanta fe originaria!
¡Ay afecto desvirtuado!
¡Ay lealtad derrochada!
¡Ay amor desperdiciado!
¿Qué has hecho con lo mejor
de mis mejores hermanos?
Manan sangre las heridas
de los santos ofrendados
a tu gloria y tu buen nombre
que convencidos confiaron...
Manan sangre las heridas
de inocentes y valientes,
insanos o desafiantes
a quien han demonizado
entre desgarros y muerte,
suplicios y hogueras varias
invocando tu alta gloria
los dueños de las espadas,
los que amarran al pasado,
los verdugos de lo humano
Manan sangre las heridas...
y lo oculto saldrá a luz
lenta trabajosamente
la roca verdad se mueve
por la conciencia gregaria
del animal reflexivo
y por la rueda de la historia
que busca su propia Gloria
Manan sangre las heridas...
¡y ya no las curan tus manos!

 

ya somos dos compañero,dos que no sienten,dos que no ven y que ven,, la cruda realidad del echo puro... pero el poema es impresionante,,por qué lo dice todo y más..un sentimiento frustrado de adoración sin un mínimo gesto de recibir nada...
lo dicho gran poema
saludos
fran

 

¡Gracias fran por recalar en este poema!
Abrazo

 

Edité mucho, pero tal vez no lo suficiente...