A Una Gran Mujer

A ti que eres el más divino ser,
que por amor y con tu amor
dentro de tus más profundos sueños
me imaginaste y la vida me diste.

Tú que eres de los cariños
el más dulce del universo,
y que con ternura, paciencia,
amor y dedicación tu vida entera
sigues dando por nosotros tus hijos.


Por todos aquellos años maravillosos,
por las miles de noches en vela,
por las incontables alegrías dadas
y por los numerosos correctivos aplicados.

Por tus lágrimas, por tus risas, por tus besos,
por la entrega de tu corazón, por tus sacrificios,
por el incondicional amor que nos entregas
en cada instante de tu vida, día con día.

Por toda tu experiencia compartida,
por ser mi maestra, mi gurú, mi guía,
por ser el pilar que cimenta mi vida,
y de mis infantiles noches la paz bendita.

No alcanzaría la tinta, ni mi vida entera
para agradecerte maravillosa mujer
por decidir permanecer siempre a mi lado,
en lugar de perseguir tus propios sueños.

Por decidir compartir tu vida con la mía,
en lugar de darme tu tiempo a medias,
por pasar las horas, los días y los años
siguiendo constante mis primeros pasos.

Porque son tantos los interminables recuerdos
tantos los bellos y también los duros, malos,
difíciles e importantes eventos en mis días,
que reflejan los que soy en estos momentos.

Porque aún faltan más en mi memoria
un sinfín, de más de estos sucesos,
que a lo futuro recordare también,
cuando en la distancia, llegue su tiempo.

No, simplemente no acabaría de decir nunca
lo que en un abrazo se pueda expresar
y transformar en un sublime mensaje
que en el calor de tus protectores brazos
pueda depositar con el sello de mi amor.

De ese mismo amor que sembraste
durante siempre en las fibras de mi corazón,
y que alimentaste con la esencia del creador,
en un mundo fantástico, libre y soñador.

Y qué más puedo decir con las letras,
pues no existen las que puedan expresarlo
en la palabra hablada o escrita,
ni en este, ni en ningún otro idioma.

Solo me queda el infinito por delante
y en el por siempre agradeceré
al gran espíritu eterno por haber
creado a tan extraordinaria mujer.

A ti, que un día decidiste ser madre,
GRACIAS infinitas por existir,
GRACIAS eternas por ser y estar,
GRACIAS mamá por ser mi MADRE.
​

 

Y gracias a ti amigo poeta por enalteser a ese gran ser que es la madre " mujer, taller natural de la vida" mis estrellas a estos bellos y sentidos versos.

 

Hola tu si tienes musa a quien dedicarle tus versos, bonitas letras para tu MADRE, un gusto leerte. saludos y estrellas
¡SONRIE