A mi Madre

A MI MADRE



Hijo del alma no me abandones, que soy tu madre, ten compasión.
Que soy una pobre muy viejecita y ya no gano para mi mantención.

No recuerdas, hijo mío, cuando tú enfermo en la cama
y yo a tu cabecera, me decías con fervor.


Yo no abandono a mi madre, por mucho que me aconsejen
que una madre en este mundo, es la prenda de más valor.


Ahora por esa señora que tienes a tu compaña
tiene tan malas entrañas que fue la que aconsejo.


Por eso me abandonas sin tenerme caridad
Y consientes que me vaya a morir a un hospital.


Han transcurrido algunos meses y ese hijo malo a la cama cayo,
su señora mujer tan mala al verlo enfermo se fue y lo abandono.


Al verse solo, solo en la calle y despreciado de la población.
Desde la cama decía llorando, madre querida y de mi corazón.


Yo no he tenido la culpa de lo que hecho contigo,
todo me lo aconsejaba aquella mala mujer.
Ahora que me ha visto enfermo se ha ido y me abandonado
y no tengo quien me mire como no me mire usted.


La madre que se ha enterado, y del hospital salía
Que quería ver a su hijo aunque el la abandono.
Y le dice hijo mío ya estoy a tu cabecera
Aunque tú me abandonaste a salvarte vengo yo.

(FBorrego)

 

Incondicional y olvidadizo el amor de madre. Excelente poema. Un placer leer y dejar mi firma. Saludos.

 

Es un honor recibir estas plabras gracias