A aquella rubia del pasado

Rubia de 14 años,
que a los 14
me enamoraste.


Duele el primer amor
como un puñal
en el corazón.

Duele como lo
que no se tiene.
Duele como duele
la realidad del des-amor.


Cuatro décadas después
no decae el recuerdo.
El invierno es más invierno
y en el verano hace calor,
cuando rememoro tu sonrisa;
cuando sin prisa
te veo en el álbum de fotos
de mi niñez.

Si alguna vez
no te lo dije:
Te quise de corazón.

LEUGIM PACAND

 

Amores de niño que no mueren nunca. Pero el tiempo trae al blanco y negro las ajadas líneas que hacen vetusta la fotografía. Esas que cruzan la cara como simas del terreno recorrido que ha carcomido la paciencia. Abrazos para la nostagia de tus líneas

 

Los rayos del sol de su pelo,
el oro de su pelo,
y el color de su pelo.

Me gustó. Un saludo.