Fin.

No esperes que vuelva a sonreír como antes,
pues algo dentro de mí se apago y ya no brilla igual,
no esperes que vuelva a confiar en ti los secretos de mi corazón,
ahora los guardo con recelo para mí.

Hoy todo se desvaneció y ya no espero más de ti,
¡que más da! siempre me pasa igual y ya debería estar acostumbrada;
te mentiría si te digo que fuiste el amor de mi vida pero no fue así,
de serlo habrías llegado para quedarte y nunca alejarte.

Sólo fuimos una historia fugaz que la superan otros obstáculos.
Guardo tu recuerdo en un algún lugar remoto de mi corazón
donde el tiempo y el espacio se congelan.
Y sin embargo... esto no es un adiós sino un hasta pronto.
​

 

Mi primer intento de poema como resultado de alguien que me involucró en este sitio y quien me inspiró el día de hoy.

 

Está muy hermoso, tu reflexión, tus palabras nacen con sentido y se esparcen gratas en el poema. Bienvenida amiga y felicitaciones.
Un saludo.
Rodrigo del Río

 

Gracias, saludos.

 

esta lindo tu poema bb

 

Melancólica la expresión de los versos. Queda un sentimiento de tristeza que agobia a un corazón enamorado. Saludos cordiales.

 

Es una espinita de amor, que provoca el toc toc del corazón,
donde hubo fuego, cenizas quedan, atizando, vuelve a arder.