Andén

Todos lo andenes
tienen color a despedida
y aromas de esperanza,
(cada uno lo percibe a su manera).
La espera es una palabra lenta
que, a veces, duele
como aquella canción de Serrat
y su Penélope.

Ya se que hablo más de la cuenta,
que lo que os digo es cosa
por todos conocida pero,
aún así, os lo vuelvo a contar
por si acaso alguien,
quiere recordar como yo
su particular adios,
o su alegre reencuentro.
(el primero, es un viento alado
que siempre nos alcanza),
(el segundo, suelen ser ilusiones
que casi nunca se cumplen)...

De cualquier manera,
seguiré sentado en este viejo banco
escuchando el anuncio estridente
de las llegadas de nuevos pasajeros
por si acaso.

 

¿Quíen no ha vivido esta situación? creo que muy pocos; un tren que se marcha lento y que no para su marcha, indeciso corazón, que en el anden queda yerto en el aire se dibuja el blanco adíos de un pañuelo de un tren, que poco a poco se aleja y no puedo detenerlo:::triste:::saludos leire