volar

marejadas de soplos en mi rostro
ventarrones
suelo mirar el universo volátil de una hoja
graciosidad inscrita en la física del viento
en las entrañas de su cauda
tostada víctima del sol

eres a muerte en tu universo
y nos dices así
cómo es esa aparente libertad
la que no pende ya del tronco y de su savia
la que ha perdido el verde en su destino
pero puede volar

me despido de ti sin son de orgullo
nada tengo de qué
soy hijo de hoja
voz del agua
mágica fuente extraña donde mana
inexplicable aliento que se escribe
y si es que hay voz
se canta

nada sé hacer que valga
ni sé qué es de valor para forjarlo
o tejerlo
solo suelo mirar
y mi cantar festina tanta gracia
tostada y moribunda
tu derecho a volar,
con eso te despido, hoja

ve por el viento
mientras yo canto

​

 

La libertad es primero, para volar, como para cantar, se la necesita como al aire. Me recreo en su creación. Abrabesos y todas las estrellas posibles.

 

Gracias por pasar, querida hermanita, besos y feliz domingo

 

La hoja como alegoría del tránsito, de la existencia, del trascurrir, así lo interpreto yo, me gustó mucho, sinceramente.
Un saludo!!

 

MUY BELLO dentro de sus aires de libertad, saludos y estrellas.

 

Ya vuela libre tu hoja. Brotó tierna y firme, fue sombra y vida y ahora será alimento que nutrirá raíces.

Un abrazo

Palmira

 

hace despertar emociones, con ese arte que tiene para hacer poesías de gran inspiración, las hojas y su sentir hacen un ambiente bello, lírico

saludos cordiales

 

Hermoso, destila sabor a aire, a brisa en el rostro tu poema, lo he disfrutado mucho.

 

Hola Melqui, es muy profundo tu poema
sobre ese derecho a la libertad
que si forma parte de una hoja
cómo no lo va a formar de los hombres que nacieron libres
y nadie tiene derecho a negarles ese vuelo.
Un abrazo.