Un atardecer

Y de pronto el atardecer se hizo tan bello
Nubes blancas y grises parecían encantadas
Nieves que brillaban

Infinita belleza se hacían esas nubes de la vida
Tú belleza infinita recordé
Con dolor te extrañé

No sé si ya más nunca otra vez te veré
Si otra vez la vida me permitirá con mí mirada acariciarte
Verte y como siempre adorarte

Estaré así mirando la vida pasar
Recordando tú belleza digna de adorar
Días de la vida para recordar

Soles así hacen bellos los eternos atardeceres
Dibujan bellas nubes que brillan e invitan a soñar
A extrañar

Kada día debiesen nacer los más bellos atardeceres
Para mirarlos con pasión y pleno de amor
Para recordarte con el más bello dolor

Amada eterna de los atardeceres eternos de la vida
Te los regalo en mis sueños más bellos
Para que ellos te cuiden y te den por la vida lo más bellos placeres

Yineska, porque siempre serás bella e infinita
Por siempre palabras sentidas para ti

 

Romántica dulzura la de tus versos amigo...un gusto leerte...
Te abrazo con todo mi cariño...

 

Un pome dedicado
que sale del fondo de tu alma
Para tu apreciada.
Estoy segura que si ella pudiese leerlo,
Estaria muy feliz.
Un abrazo y bienvenido

 

Amigo sigue so~ando con Yineska, tal vez te este esperando ... muy bellos versos ... abrazo calido

 

Javier una bella elegía a la mujer que amas, y quizás algún día regrese a tí, aunque en tus sueños ya permanece.
Bendiciones. Pili

 

Hermosura, divinidad de letras.