Tan Simple.

Simple.​

Fui valiente y corrí el riesgo

de mostrarme vulnerable.

Mostrando inseguridades,

lo vivió cual despreciables cualidades.



Estoy atado en mi mente,

atrapado en mi cuerpo.

Pensar en ella es recurrente,

sentir su esencia muy adentro.



La amargura se hizo intensa

y la tristeza intolerable.

Soportar fue una proeza,

y volver a rescatarme.



Hoy comienzo a retornar,

a sentirme nuevamente.

Ha empezado la tarea.

Reconstruirme íntegramente.



Solo quiero que esté bien,

y la felicidad alcance su pecho.

Que lo perverso no la arrastre,

ni que una trampa la acorrale.



Miro el cielo y agradezco,

el haber vivido temporadas.

De complicidades formidables,

y de ternuras encomiables.



Mi melancolía se va disipando,

y el humor ha regresado;

dulce tristeza aún permanece.

Me hace bueno, me hace humano.



Bella de mis sueños.

Esperar ya no debo.

Volver a quererme, es mi tarea.

Revalorarme y elevarme.


​

 

Preciosa divinidad de soberbia inspiración.

 

Hola!
Gran poema con el que me encuentro y con un final que llena de fortaleza, encantada de leerle abrazos!

 

Encantado de ser leído.
Desde ya disculpas por los oscuros poemas que van a aparecer de cuando en cuando (ejercicios de auto-exploración)

Espero que sigas prolífica y enérgica con tus escritos.

Buenos deseos.

 

Excelencia en el trato del verso y dominio de la poesía.

 

Hermoso poema de amor y desamor repleto de una bellisima melancolía. Me ha gustado mucho Vronte. Un abrazo. Paco.