Soy poesía.

Solitario en un peñasco
miraba al enfurecido mar.
Me pregunto, ¿cómo pueden
sobre él las gaviotas volar?
Sentado en el umbral de mi casa
veo al invierno pasar.
Me pregunto, ¿cómo hacen
los pájaros para cantar?
Distante, desde una nube,
veo a la gente llorar.
Me pregunto si algún día,
¿ellos también reirán?
De pronto veo a un poeta;
que no canta, no ríe
pero me sabe buscar.
Para él soy pájaro, soy nube,
soy un canto, un despertar.
Soy un cielo estrellado,
un amor que ciego va.
Soy el limbo, tal vez el infierno,
soy el viento que soplará.
Soy un duende, también su magia,
soy el capullo que nacerá.
Me doy cuenta que soy parte
de algo que alguien recordará.
De algo por quién alguien suspirará.
Soy yo la que llenó,
tus horas de adolescencia sin par.
Soy yo, la poesía, en su clara esencia,
en su nota final.

 

Hermoso, muy bellos versos muy lindos, precioso.