Ruedas perdidas

Estás gris tanto como el surco de arena
que llora en tus pies errantes.

Has venido a mí,
buscando parir olvidos,
rogando un poco de cerveza
dos baladas de Neruda (te he dicho que Neruda era poeta)
y echarte en mi lecho hasta quedar vencido.

Todo para matar al recuerdo.

Solíamos matar nombres los viernes
después de que nos dejaban
un lunes o un martes
rellenos para colmo,
con papeles tardíos
por culpa de tener hasta el pelo
mojado, por el miedo de perderlos.

Y los perdíamos…

Ingredientes para curar corazones:
Nada hay más fresco que el rock
Para torturar heridas,
Y nada más hiriente que una sinfonía
De bocas mudas como lo que callamos.

Sin embargo
Ahora te dije:
No Mateo, tengo visita.

/Era viernes
Yo estaba con alguien
Tú estabas medio ebrio y solo/

Es Martes:
Mateo: ¿Puedes el viernes?

Sara Montaño
Derechos Reservados

 

Preciosos versos...
Singular manera de hacer poesía, saludos y gracias por compartir tu escritura.

 

Me gustó, una manera especial de hacer poesía.
Saludos

 

Bella perla de tu buen versar mi querida amiga. Un placer leerte. Besos con cariño.

 

tienes una forma de escribir
tan especial
que dejas en mí, una tormenta de mar.

me envuelve y encanta
Estrellas
para mi estrella del versar. ​