¿Por qué?

¿Por qué?

Esquilmado, agotado,
suprimido y depauperado.
El caudal de mis versos
impúdicos, beligerantes
y aciagos
se permuta en fría arena
que se me escapa
por entre los dedos,
sin que nada pueda hacer ya
por evitarlo.

Lo juro por lo más sagrado,
mi inalcanzable amor...
Te aseguro que bregué
hasta el límite de mi resistencia
para detener todo esto;
por evitarnos este execrable
y malhadado destino a ambos.

De nada sirvió
tan descomedido empeño,
sin embargo,
pues tanto tus mermadas
fuerzas como las mías
nos abandonaron en el
instante clave;
en el momento álgido.

Quise retenerte,
atesorarte y conservarte
contra viento y marea,
hasta el final de mis días...
Tú debías saberlo
mejor que nadie.

Así pues,
¿por qué te marchaste?
Vocifero a solas,
herido como un animal
sediento y perdido
en el desierto;
incapaz de explicarme
a mí mismo el porqué
de todo aquello.

¿Por qué?
¿Por qué lo hiciste?
¿Cómo pudiste?
¿Por qué me abandonaste?

 

Woww...mm así es...profundamente desgarrador...un grito del alma...
Un gusto leerte amiga...te abrazo con todo mi cariño...

 

Tristes versos cargados de angustia y pesar por la partida abrupta del ser amado.

 

Gracias a todos por vuestro tiempo y gentileza, queridos amigos.