Pintada.

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Torcí la curva enderece la recta más que paso firme es decidido,


desde que nací duermo y me despierto bajo el mismo cielo


parece que a cambiado el mundo, pero no soy yo que voy madurando


poco a poco y espero no culminar nunca esta tarea,


la fruta madura hoy mañana estará podrida, mejor seguir viviendo.


Crecí entre las bocacalles del Raval y jugué en ellas


desde la cobijada tarde hasta la oscura noche


con los mal llamados y sucios gitanos, negros y moros


mis amigos, nuestra bandera el parque que no conoce fronteras

nuestro corazones preparados para una vida entera llenas de vaivenes


que los muros que nos rodeaban se convertían en murares por gente que no he vuelto a ver


pero que no olvidare.


Duele escribir que con el paso del tiempo hay gente que se pudre


sin tan siquiera haber madurado ¿cómo lo harán?


Odiando y repitiendo la misma cantinela.


Hoy he visto una pintada negros fuera de España que he tachado y he escrito:


Quisiera que las fronteras sean como el horizonte a cada paso que dé más lejos queden.


Quizás solo arranque una sonrisa a cualquiera que pase y la vea, pero no podía no

hacer nada y pasar día sí y día también y no hacer nada.

 

Bello alegato por la igualdad que todos los seres humanos merecemos, todavía quedan muchos racistas que no tienen dos dedos de frente. Me ha gustado tu poema amigo Lekiam. Un abrazo. Paco.

 

Gracias Paco, con gente como tú esa igualdad parece más cercana.Quizás algún día....