Palabras

Fuimos incapaces de perdernos y alejarnos,
y tiramos de la cuerda cada noche,
cara a cara, espalda contra espalda
para de nuevo reencontrarnos,
y de mientras la luna nos observa con sus ojos de brújula,
guiando a las estrellas, siguiendo el rumbo de tu barco de vela.
Y yo, que sin miedo al extravío, continúo vagando en este mar
de recuerdos, desterrando agua contaminada para dejarte hueco.


Fuimos incapaces de no volvernos poesía,
y nos hicimos palabras,
pues los versos no mueren evaporándose en el tiempo.
El tiempo… que con miedo a detenerse presagia nuestro abrazo,
temiendo volverse hielo al cálido contacto de tus manos,
y de nuevo derretirse lentamente al alejarnos,
viendo tu estela alejarse en carretera.


Fuimos incapaces de no regalarnos alas,
de no aprender a volar arrojándonos al vacío,
de no susurrarnos lo que somos al oído:
palabras.
Palabras que me ofrece tu mirada en la distancia,
disfrazadas del roce de tus labios en mi piel,
de tu aliento deslizándose entre mis dedos,
de caricias de madrugada, danzando sobre mi alma,
de pájaro azul posándose en mi ventana.
Palabras que vestidas de amantes de invierno,
dejan fluir primavera a sus pasos.


Fuimos incapaces de tantas cosas,
y capaces de tantas otras…
Tu, de hacerme sentir sonrisa,
de enseñarme a contemplarme,
de perder el miedo a ser alguien.


Y yo, de respirarte, de pensarte,
de volverme nómada, verso errante,
que no se cansa de buscarte en mis palabras
y de nuevo encontrarme en las tuyas.


Estefanía André Feijoó.

 

Hola muñeca, donde estabas te habías perdido. Y ahora que has aparecido
puedo decirte que cada vez me sorprendes más. Felicidades.

Saludos,

 

jajajaj muchas gracias! con estudios y todo eso me falta tiempo para la poesía
Pronto me pondré a hacer tanta poesía como pueda! jajaja

 

Ajajá... tiempo sin leerte, cribaré el oro que brilla por aquí, tamizado con tino y tiento...

Y yo, que sin miedo al extravío, continúo vagando en este mar
de recuerdos, desterrando agua contaminada para dejarte hueco.

Son mares donde las olas dificultosas avanzan por los cuerpos de sirenas y ballenatos del recuerdo, sin duda.

pues los versos no mueren evaporándose en el tiempo.

de no susurrarnos lo que somos al oído:
palabras.

Hermoso final. Poema sin altibajos, con un tono que denota compromiso en cada palabra. La identificación del autor/a con su poema es algo común a muchos de nosotros; segregarse a golpes de punta de estilográfica -como harían antes y no tan distante en el tiempo nuestros colegas en los albores poéticos-, o a golpes de la uña que lacera la superficie de la tecla intro, como hacemos nosotros, rasurar y sesgar en pequeñas porciones como un librillo el alma inmanente de poeta y que la gravedad del amor la deje firme sobre líneas virtuales. Es común a nosotros, un pecado o un credo que no se profesa, es... simplemente es. A veces, una oración suspendida que nos acompaña como halo, aura, estela o rastro vivífugo. Me inventé la palabra... huyendo de la vida y arribando donde pervive aquello que no lo es.

Un abrazo, rep por volver y escribir tan-bién.

 

Tus comentarios siempre son una gran motivación para seguir escribiendo y cultivando mis versos
Muchas gracias Pablo! Es increíble cómo llegas a captar la esencia de cada palabra!
Un abrazo

 

Bellas letras, admirable escrito, precioso.

 

muchísimas gracias!!

 

Amiga, no hay mucho de tanto que se podría decir.Es simplemente maravilloso.Cada linea,cada trazo.¡Soberbio!Traes un estilo profundisimo y marcado hasta el deceso!Me encanta!Es el tipo d poesía que me gusta,original,inmenejable,hay que leer y releer,nada obvio...uf. sin palabras, es divinamente único.
Te dejo mis puntos,te dejaria mil y una estrella.Abrazos dobles.

 

Muchísimas gracias!! para mi lo maravilloso es leer comentarios como el tuyo!
Hace poco subí uno nuevo, no sé si estará a la altura de este, pero desde luego espero no ir perdiendo facultades con el tiempo, si no ganándolas para seguir maravillando a poetas como tú
Abrazos triples!!