Oscura Soledad

“En el supremo amanecer de un nuevo día, miro como los demás sonríen, aman, viven: son felices mas yo no lo soy.
Vigilo bien y solo veo en ellos algo que no tengo: amor y alegría totales,
Alguien como yo no tiene esos simples elementos pues alguien, antes, mutilo esos elementos y hace mucho, que de sus restos emana un olor a dolor.

Ese alguien ahora encuentra nuevas pasiones y amores en otro pues conmigo acabo,
Mi interior esta cada día desangrándose como quien corta la yugular humana;
Mis entrañas agonizan a cada momento y en mi mente, sus recuerdos siguen frescos.
Sobre mi se posan cuervos negros que, como mi sombra, son mi única compañía.


El día es claro, el astro rey brinca su calor a todos pero mi corazón esta frió y sin vida,
Pues ese alguien le quito toda su energía, su razón de existir en este duro mundo.
Tengo sellados estos males mucho mejor que cualquier Pandora con su caja,
Aquí nada ni nadie podrá hacer algo, la llave para abrirlo se ha perdido.

Mis ventanas al alma sucumben al mar de agua salada que contienen y pasan por mis mejillas,
Ya su humedad es cosa natural en esta faz toda desgarrada por la crueldad.
No siento a mi corazón caminar ni a mis oídos percibir bellos sonidos naturales,
Mis ojos ya no ven como antes y mi armadura esta toda dañada. ;
No hay cura para mis males ni herrero que repare mi vestimenta.

Sucumbo a la infinita oscuridad, mis trajes lo dicen y lo testifican,
Burlas mortales se hacen presente a tratar de hacer mas destrucción de las ruinas,
No puedo hacer nada, no logro rechazar nada de estos males,
Pues estos hace mucho que se hicieron parte de mi piel y de mí existir.

No temo a la llegada de esa mujer flaca, toda macabra pues hace mucho que muerto estoy,
No temo a la locura pues en ella me he refugiado para escapar de mis verdugos para evitar sus sonantes hachas y martillos.
Tampoco le temo a la dura indiferencia ya que, al tiempo que la tribu me ha abandonado, ya he estado en ella,
Después de ti, no temo a nada pues ya he estado en todos esos infiernos y muchos otros más.

Aun sigo mi vigilia sobre ustedes y los veo a cada momento, más felices pero yo no lo soy.
Creo que ahora si partiré hacia el horizonte, lo haré solo como un pájaro errante, si rumbo fijo ni destino esperándome, ya que hace mucho no tengo nada y a nadie aquí.”