Minutero

Anda mal el reloj, ¿por qué me falla?
No se mueven las horas, qué sucede.
Es la vista mirilla, fe que agrede.
Son las moscas el día, que no calla.

Qué esclaviza mi pecho, el tiempo encalla,
donde quiera su arribo, ¿por qué cede?
Si naufraga, la ausencia que precede
deja astillas de guerra, ¡cruel batalla!.

Hay un rictus de franca decadencia
cuando todo parece ajeno, endeble.
Minutero sentido, sé indeleble,

sitio incierto que pierda, y que repueble,
libertad, que no pierdas en tu esencia
los segundos que fueron tu querencia.

 

Muy buen soneto, José Luis. Cada uno que escribes supera al anterior. Un saludo.

 

Es extraño (o tal vez no tanto, pues es un viejo compañero), pero sentí la ansiedad del insomnio en los cuartetos, cuando el tiempo se eterniza en busca de ese ansiado sueño que no llega y no paras de mirar el despertador, que sigue en la misma hora...
Me ha gustado mucho tu soneto melódico, José Luis. Un placer de lectura.

Un abrazo.

 

Bonito tu soneto José Luis, saludos cordiales amigo,

 

Valoro tu apreciación y la agradezco, signo de que voy por buen camino en esto de aprender. Saludo.

 

Muchas gracias M. Á. M. Pienso que es una excelente lectura, esos sentimientos están en la base de la construcción. Es un placer tener tu visita. Un abrazo.

 

Gracias amiga, me alegra que te guste. Saludos.

 

Buen soneto, José Luis. Me ha gustado mucho. En algunos pasajes me ha evocado aquel bolero que dice "reloj no marques las horas...". Un gusto leerlo. Saludos

P. D.: Me he dado cuenta, después de leer el poema varias veces, que algo no me sonaba del todo bien al oído, y es el verso 6, que está acentuado en las sílabas 3, 5, 8, 10. Para que sea un endecasílabo melódico correcto tienes que acentuarlo en 6ª. Pero supongo que has escrito el poema de oído (a mí me pasa con frecuencia) y no has comprobado la rítmica de todos los versos. De todas formas míralo, a ver si estoy equivocado.

Abrazos

 

Muy agradecido poeta, no había percibido ese error. El placer es mío por tu lectura. Saludos

 

Me gustó mucho... el ¡tic tac! y sus cosas.

Un placer leerte; como siempre.

Saludos.