Merveilles

...guarden mi alma
de este eterno pesar,
oh, silenciosas hadas!

Esta voz
reniega de mi alma,
estos labios
fingen el placer,
estos ojos
lamentan una palabra
y mis manos...
vacias están.

Hoy como nunca,
me atan las memorias
a un sinfín
de lágrimas colapsadas,
a los besos que perforan
mis estatuas de sal
y mi coro de ángeles
se apaga lentamente
entre fuegos fatuos.

Sólo miro a las nubes que caen...

como ilusión que desaparece
cual grises lagrimas de sirena,
como el otoño de mi mente
sin mis árboles de vidrio
o la voluntaria tortura
de mendigar corazones
cuando no se tiene manos
para intentar tocarlos.

Sólo sé de este principio de polvo
y de este querer volver
que nunca tiene final,
mas llevo en mis noches
mil relojes de arena
que me susurran
tu nombre de mármol...
mi dulce cadaver.

 

No lo consigo... Un gusto leerte