Libertades

Déjame ser libre...pero serlo,
no me dés la libertad para llamarme.
Ni me busques, solo por buscarme,
ni detengas mi volar, solo por verlo.​

No me ofrezcas de tu mano, la comida,
que el trino encarcelado suena triste.
Y a mi horizonte de pájaro, el alpiste,
le sabe más en tierras florecidas.​

Déjales las celdas coloridas,
a las aves de plumajes superiores.
Que los pájaros silvestres y cantores,
son felices...con las alas extendidas.​

Marino Fabianesi.​

 

Que no te corten las alas, brillas y das un empuje de majestuoso ímpetu a este sendero que es llamado poesía, me ha encantado ese sabor de sol, a luna, a firmamento. Un placer, revisa algunos acentos. Besitos
Lau

 

Gracias Lau, por tan profundo y bello comentario.Con ese ímpetu que me das, me llenas el corazón de alegría.
Espero seguir teniéndote cerca.
besos...Marino.

 

Sí señor, para las aves de todos los plumajes el amor debe sustentarse en un acto de absoluta libertad. Amores que impliquen ataduras no lo son. Abrazos.

 

muy bonito
me gusto mucho el final que le diste

mis felicitaciones, fue un placer leerte

 

Muy bueno Marino, la libertad no debe perderse nunca.
Cariños y a volar

 

A simple lectura parece una alegoría a la libertad del alma pero se podría aplicar a un contexto más amplio. En definitiva todas las lecturas sería perfectamente encajables a esta bella poesía.
Mi admiración estimado Marino y mi abrazo por supuesto.

Daniel