Lamentos oscuros

Camino por las veredas de la angustia
y una llama odiosa quema con rencor mi pecho;
las imágenes me asaltan sin muestra de piedad,
los porqués me taladran con pasión y desvelo.

Bastos sinsabores desfilan por mis mejillas,
en forma de vidriosas lágrimas dispares;
he extraviado irremediablemente el sosiego,
mi paz declinó intenciones y se ha declarado cesante.

Logré comprar boletos de primera clase
para el oscuro tren de la miseria humana,
por sus ventanas logro ver a la felicidad
mientras se larga bien lejos, por mi rostro aterrada.

¿Hasta cuándo vas a dejar de dolerme?
¿Cuánto más vas a punzarme en el alma?
Estoy harto de este cruel entorno opaco
que al no ofrecerme tus brazos, simplemente me mata.

-G. Arroyo, 12/Ene./2011-

 

mis felicitaciones por este poema
ha sido un placer leer la manera en la cual vomitas ese dolor en el pecho.
saludos.

 

Una belleza,aun en su tristeza,todo el poema
y esa última estrofa llega muchísimo.
Un placer leerte ¡ Bienvenido ! poeta

 

Gracias por el comentario, saludos!!

 

Qué bueno que te gustó... Gracias por el comentario, saludos, espero sigamos en contacto.