Inocencia.

¡Oh perdida inocencia!
cuanto deseo volverte a encontrar
y llevarte por siempre de mi mano agarrada
sabiendo que nunca me volverás a dejar.

Sintiéndome niño como antes lo eras
con tanta pureza y tanta lealtad
sintiendo la vida como en la vieja escuela
Colmada de gracia, de penas, de juego y amistad.

Sintiendo muy dentro la suave ternura
la dulce paciencia, la suave igualdad
de quien vive la vida con tanta inocencia
con tanta pureza, con tanta humildad.

Como se extrañan los buenos momentos
momentos vividos de dicha y bondad
momentos que dieron sentido a mi vida
llenándola de gracia y de felicidad.

¡Cuánto te extraño Grandiosa Inocencia!
y cuanto he perdido en realidad
sacando la cuenta de tanta pureza
de tanta inocencia y tanta humildad.

Solo me queda la resta inclemente
de muchos valores, de mucha belleza y sinceridad
donde la impureza no tenía cama,
donde reinaba la felicidad.

Que anhelante estoy de esa inocencia
mucho la anhelo en realidad
porque fue en mi vida la etapa más bella
la etapa deseada que no volverá.

 

Muy buena pintura de la melancolia. Muy bueno.
Un abrazo.
Christian.

 

Lo que dejamos ir un día, la inocencia que jamás volverá........hermoso poema; un abrazo

 

Gracias por el comentario;espero ser tan bueno en el futuro como uds