hadas

En el día de las reinas hadas los rostros tristes deslumbran felicidad y los retorcidos robles milenarios Esbeltos figurines un poco más que arbustos infantiles retornan a sus primer 100 años de juventud radiante libres de moho y hongos fetiches quedan, para bailar al compas del vuelo de las hadas alegres,

Desde el cielo las estrellas les miran con intensidad brillantina a ellas las hadas, asta parece que quisieran dejarse caer y ser parte de este famosísimo libre albedrio, pero no…ellas las estrellas aunque aparenten aburrimiento incesante prefieren ser la luz que da ese toque mágico al día de las hadas,

Sus grandes bosques invisibles se tornan luminosos tanto que asta en los polos del mundo se refleja entre la aparentada soledad y los billones de copos de nieve su incandescencia multicolor,

Algunas hadas detrás de las luces de las estrellas se meten a bailar, Es entonces cuando en los cielos polares se les mira tibiamente albriciar,

seres humanos anacoretas soliloquios y un poco locos, aseguran que hasta se les a escuchado cantar y gritar,

También el mar las felicita por un milenio mas cumplidas les obsequios desde la profundidad de sus océanos estrellas marinas aperladas de anemonas doradas, y un arpa echa de faringes de ser marino, un caballito de mar al que por cierto le encanta bailar, y espuma oceanica para su bosque adornar con esa blancura espumosa jade,

En el dia de las reinas hadas tu? que lees regalarías? o tales lo olvidaste allá en los recuerdos de tu infancia, porque si tu quieres les podemos regalar una canción, un día major, que tal risas desnudas y miradas sorprendidas serca a suspiros de ensueños, para que sepan ellas las hadas que aun las recordamos.,