engaño

ENGAŇO
Una misma casa
dos vidas separadas.
Nada que ver
con un cuento de hadas.
Yo que sí
él que no.
El que arre
yo que so.
Si un día soñé
una complicidad con él
en pocos años vi
que no era para nada así.
Cuando él iba, yo venía.
Cuando él velaba, yo dormía.
Cuando yo lloraba, él reía.
La duda se instaló.
¡Mala consejera!
La desconfianza llegó.
Indagué y encontré.
Las mariposas de mi amor murieron.
Las alas se les troncaron.
Y caí.
Profundo, profundo
en un lugar vacío, frío.
…..........................
Un día desperté.
Y como el fénix
de mis propias cenizas renací.
Más fuerte,
menos soñadora.
Mas dura,
menos cumplidora
y ¡mucho más luchadora!​

 

Gracias Maramín. Menos mal que renací!!!!
Gracias por pasar por mi portal y quedarte un poquito en él.
Saludos
Quintana

 

Leyendo tu respuesta al usuario anterior es bueno saber que renaciste. Lo que renace lo realiza a condicion de haber aprendido a sembrar en la ceniza, con la ceniza, junto a la ceniza y, de todos modos, dar frutos en lo más alto, dulces, porque se hundido las raices más hondo que las cenizas, hasta tierra humeda y viva.
Besos, Merche