¡Ay señora!

-Ay señora que vos llevaís mis cuernos
sujetos al fru fru de tu cintura
y yo que soy Don Juan y caradura
reclamo tu piedad de besos tiernos.

-Si mi señor, que vos llevaís los míos
ocultos bajo un aura que es mentira
lo que yo tengo es ágil y se estira
lo tuyo ni se sienta, está sin bríos.

-Pues señora me han dado una pastillas
que me llenan el cuerpo de alicientes
y alistan mi facón de maravillas.


-Garatusas de machos impotentes
prefiero saborear unas tortillas
y usar tu cuchillín de mondadientes.​