Arenas movedizas

Mis pasos postizos, el camino tatuado.
El sol de cobre con su huevo podrido
y el jugo de lumbre detrás de los que pasan.

La araña se estrangula con un pelo de tu sobaco
y te estoy barriendo,
te estoy escondiendo bajo la alfombra
para que no tiembles,
para que no leas en el periódico el crucigrama.

Ábrete donde te digo y arráncame,
aquí todo tiembla con la ceniza
y el rostro se enmascara para entrar al túnel
a pelear contra los gestos.

Las tuberías con cálculos de sarro
y tú duchándote bajo las agujas de los truenos
a la hora exacta que no recuerdas.

Las ronchas de la silla me estragan
y hoy no es seis de noviembre
ni el día del revólver de mi primera comunión,
pero estoy a punto de soltar el hervor
para que metas tu lengua y la desplumes.

Con un ramo de cucharas te estoy esperando
en las arenas movedizas de mis zapatos.

15 de agosto de 2020​

 

la razón parece un sueño, la locura se empeñada en apartar el crucigrama.
el triunfo de la dialéctica en un ramo de cucharas.

un gusto leerte
saludos.

 

Interesante concepto sin duda!!!!!!

 

Otra vez me sacaste la risa con la araña estrangulada con un pelo de su sobaco y lo peor que leí mal y leí un ramo de cucarachas y más me reí pero resulta que era ramo de cucharas, le quedaba mejor cucarachas un gusto leerte, me da gusto que sean cosas más actuales

 

Es que he confundido las horizontales con las verticales, siempre. Quizás prefiero estar en paz a tener razón, y siempre terminó con una cuchara, yo, que tomo el sol con un tenedor.

No. La paz tiene pulgas.

Y yo encantado de que pases, bro. Saludos cordiales.

 

Cuando caminar se hace pesado, el camino se arrastra.

Gracias por pasar, amigo Máximo.

 

Era un pelo inexistente y la araña sufría de aracnofobía. Me hubiera encantado cambiar las cucharas por las cucarachas, pero estos animalejos son los más espantosos que existen, y todavía no estoy preparado para dejarlas entrar a mis letras, por más echadas a perder que estén.

Una vez en que andaba solo de madrugada con unas cervezas encima, vi una cucaracha enorme en la acera mojada; la contemplé de lejos y me dije: Hoy les vas a perder el miedo, Peter. Me acerqué para darle un pisotón, pero la cosa esa corrió muy rápido, luego se detuvo un instante, se escucho un zumbido, y se echó a volar... Después quien estaba corriendo era yo, rezando el Credo, y sintiendo como si un zapato gigantesco me fuera a aplastar.

Gracias, amiga poeta Dánae/Eunice. También me resultó refrescante escribir esto, ojalá que así sigamos. Saludos cordiales.

 

Qué trascendentales se vuelven ciertas caminatas para los caminos y viceversa... lo caminos marcando las huellas del que aún no los pisa, y les pesa... esas imágenes son de, que te digo, amé el ramo de cucharas porque me recordaste un ramo de flores que no eran flores, una historia re surreal pero bien apreciada, creo que era un matorral o algo así, tu te peleas hasta con el polvo que levantas al andar, equilibrista y sobreviviente, tengo una línea de un escrito que dice así... y ahora que te leo se me reveló... "El largo camino provocó su incursión al revelarse cada una de sus huellas..." solo que para ti son movedizas, y ese camino del que hablo yo es firme... Oye Peter, me gustó mucho, yo veo todo a color y a detalle... Gracias por compartir tu arte mi Apreciado Amigo y Admirado Poeta @Martín Vera . Te saludo desde mi butaca estelar con mi insistente afectuosidad y mis desquiciantes buenos deseos sinfín ☘

PS. Pensé en esta canción porque casi siempre que pienso en caminos pienso en ella, ten, y son movedizas sobre la Mar :

​

 

Las huellas por delante y el tercer ojo necesario para notar su fosforescencia cuando hasta la oscuridad se apaga. Amiga poeta Grace, ya sabes que me encanta tenerte en mis líneas, con tus nítidas impresiones y tu comentario que abona siempre un conocimiento, una experiencia. Gracias también por compartir tus fragmentos y compaginarlos con los míos, es como combinar tu mirada telescópica con mi mirada estroboscópica y encontrar ahí algo bueno. Por Serrat conocí a Machado, como muchos, cuando aún no mudaba mis dientes de leche: es mí ídolo el Nano. Gracias, también, por traerlo y por gustarlo.

Abajo de dejo un detalle de mi cosecha; la línea en cursiva que compartiste me lo trajo a la memoria. Resguarda mis afectuosos saludos y mi perenne admiración.

Barquitos

No llegué a la orilla. Me quedé en mi personaje.
Quien miró el evanescente musgo detrás de mis costillas
me robó también todos los cisnes.
La tristeza servía para volar por los vibrantes canales
y ahora solo miro al puente desde abajo.

Algo del aceite negro penetró en la música
del agua que rompe la hojarasca del camino.
Mis huellas llevan una ventaja estelar y salada
sobre los barcos de papel amarillo
que se deshicieron en el fondo de mis pasos.​

 

Querido amigo, me vas a disculpar pero no puedo dejar mensaje tu foto me distrajo un poco...oyes que guapo te ves...ja ja ja ja
ok, cuando me puda comportar un poco regreso a comentar como se debe.

Besos de tutti frutti,

 

Gracias Grandes por lo que me compartes, anécdotas y tu cosecha ya la re guardo. También para lo que anegré existen los amigos. Adoré eso de mirada telescópicosa y estroboscopiosa (remolinos, el artilugio gracias al matemático, Mr. Simon)... Reloded... inventando words... Hasta la vista Peter ☘

 

Es una foto mañosa, ahí tenía yo 23 años... Ya me llovieron años y arrugas, ja ja. Gracias, mi Lupita hermosa, me has regalado una sonrisa de oreja a oreja.

Besos de mandarina.

 

Buenos días
Tus tristes letras a mi paso salen para ser leidas
Gracias por compartirlas
Un saludo

 

Qué placer inmenso leerte, mis aplausos.