Anticuerpos virtuales

Se hace insoportable convivir con esta imposición maldita, que asevera y sitúa mi calma estrepitante. Absorbiendo el sensible caudal inquietante y movilizador de mis emociones. La presencia aprisionada de mi sombra, vertiginosamente juega en contra de las debilidades acechantes que perturban mi tiempo.
A un lado de la brisa encontraré la cara de la angustia, gustosa de entender mis fueros emocionales tan enervados esta noche.
Generosamente brota desde la musa ese dispositivo virtual, que ha llegado desde mis laberínticas profundidades, con el llamada desesperado de mi subconsciente…invitándome sigiloso a navegar por las cavernas olvidadas de mi mente, allí donde vive mi alegría, allí donde reside quien una vez fui.

Nada mas intentará mostrarme el camino de regreso a la montaña interna, donde encontraré el atesorado antídoto, que resistirá el embate abismado e incierto que reunirá el dolor, para no dejarme resistir.
Desde mis universos internos dominaré la esencia de mi ser, controlaré la insanidad que proponen mis oponentes de la vida, mis rivales imperfectos.
El secreto esta aquí dentro mío, solo debo reimplantarlo, generar una cadena de anticuerpos mentales, psicológicos, selectos, virtuales, inertes, suficientemente capaces de derribar la barrera invisible que me impide avanzar.
La tela araña obsesiva decidida a obstruir mi buena voluntad.
He descubierto que el remedio soy yo, o por lo menos una parte de mi lo es, y voy a dar pelea.

 

Sólo cuando uno se harta del sufrimiento innecesario se dan los pasos para superarlo. Duro con ello!!!

Abrazos amigo,

Palmira

 

Ahí estoy yo, en ese empeño también!!! He leído con mucho interés tu escrito, me ha gustado mucho, sinceramente.
Saludos!!

 

gracias palmi, me inspiré en un compañero de trabajo, quien se encuentra en situaciones no tan extremas, pero que para él, si lo son, aparentemente por su baja autoestima.
saludos
genia
tyngui sanchez

 

mave gracias por tu sinceridad y por tu atención, me llena de orgullo viniendo de tamaña poetiza.
saludos
tyngui sanchez