Acentos finales

No la profunda herida me atormenta
que sin piedad conculca mi semblante
para después teñirlo en un instante
de un azaroso y túrbido magenta.

No la azagaya sórdida y crüenta
que su veneno pravo y terminante
hunde en mi espalda antaño rozagante
con rapidez terriblemente lenta.

No el frío intenso, graso y pernicioso
que se desliza en esta hora oscura
sobre mi pecho nudo y lastimoso.

Mas comprender que muero sin ventura,
lejos del tacto grácil y sedoso
de tu mirada, cual la linfa, pura.​

 

Excelente soneto estomado Littera,
en el que vuelcas tus mejores empeños,
logrando gran belleza formal y no falta de suspenso que resuelves magistralmente en el último verso;

Un saludo cordial,
Eduardo

 

no soy bella pero tengo un corazon hermoso (disculpa la modestia) besos literita me da gusto leerte

 

Un placer leer este precioso soneto con el que juegas escondiendo el resultado final
Mi enhorabuena y mis aplausos
Un abrazo

 

Muy buenas líneas Littera.

Gracias por compartirlas.

Saludos.