La sepia de la Toscana

La sepia de la Toscana

La sepia está ofuscada
Se pregunta quién es ella.
Sabe simular con diligencia
Todo lo que se propone
Y sigue siendo sepia
Por más que a veces lo olvide.
Sigue siendo sepia
Luciendo una gran gama de tonalidades.
Incluyendo algunas
Indistintas para el humano.

La sepia está aburrida.
Su asombro es su alimento
Y por eso se despide sin conocer los finales.
Evoluciona a pasos agigantados,
Se desfasa
Y regresa al principio para adaptarse a su entorno.

La sepia está agobiada
Todos desconfían de su conocimiento
Puede crear armas destructivas
Aunque nadie vea su potencial
Para crear obras hermosas.

La sepia construyó prototipos
Y se marchó
Trascendiendo en personas
Que jamás conoció.